El último día de Anna

 
Era domingo y Anna estaba preparando su comida. Aunque no lo parezca ser muy desordenado te puede costar la vida. Anna tenía 19 años y era muy desordenada. Además vivía en un piso sin vecinos en E.E.U.U. Acabó con su vida por una tontería. 

Anna estaba preparando la comida. Sacó una pizza del congelador, pero estaba podrida y muy dura, así que la tiró por la ventana rompiendo el cristal. A Anna le daba igual romper las cosas porque tenía hambre.

Abrió la nevera con rabia porque la pizza estaba mala y los imanes que tenía por todas partes se cayeron a una bandeja metálica que había en el suelo, con lo que quedaron pegados a ella. Anna, sacó un kebak de la nevera y lo puso en la bandeja para meterlo en el microondas, pero no se dio cuenta de que debajo de la bandeja estaban los imanes pegados.

Cuando puso en funcionamiento el microondas con la bandeja y los imanes dentro, este explotó y comenzó a quemar las cortinas y los muebles. Anna, que estaba muy asustada, saltó por la ventana sin pensar lo que ocurriría luego y como había roto la ventana con la pizza, los restos de cristales estaban tirados en el suelo e iba descalza, se cortó los pies.

Estaba empezando a desangrarse, con lo que pronto se moriría. Fue corriendo al hospital pero no se percató de la pizza que había tirado y se resbaló quedándose inconsciente en el suelo. Con el estruendo que había provocado al resbalarse, la escalera de emergencia antincendios, se descolgó y se paró justo a unos centímetros de sus ojos.

Como Anna no se enteraba de nada y nadie sabía que estaba en esa situación se quedó debajo de la escalera durante un buen rato hasta que un camión de 12 toneladas pasó por la avenida y consiguió que la escalera se descolgara totalmente matando a Anna completamente.
FIN

1 comentario:

  1. que historia más horrorosa, en fin hay que ser un poco más ordenado...

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